Experiencias.~ [Libre]

Pasar de la nada al ser, era complicado. De estar en el precioso cielo, donde todo es color de rosa; donde no hay sentimientos, preocupaciones, dolor…para estar aquí, en la tierra, cual todo era lo contrario, me lastimaba. Donde estaba el amor? En que lugar se ocultaba ese sentimiento de bondad, piedad, misericordia o…lo peor de todo, donde estaba la Fe?
En fin, yo no iba a perder la esperanza, no iba a cerrar mis ojos y dejar que todo se destruyera tal y como se creó. Iba a luchar por cambiar a la humanidad, por intentar que no perdieran un lugar en el cielo. Tenia entendido que los pecados los incitaban, obligándolos a cambiar de rumbo, pero no solo había cosas malas! Lo bueno también puede causar emoción, placer, bienestar con uno mismo…Si, yo hablaba sobre lo que pensaba, pero en realidad no sentía lo que los humanos si…No conocía los sentimientos y no estaba segura de si quería hacerlo…

Sabía que por estos terrenos circulaban también mis compañeros, los ángeles con quienes compartía el cielo. Rogaba que Cass también estuviese aquí…la extrañaba muchísimo, pero encontrarnos era un poco difícil porque mi mente se nublaba con tantos humanos. Eran como una gran jauría de caninos, solo que con razón: Te marean, corren, gritan, piensan, aparecen, son…muchos.
Caminé a paso tranquilo por los jardines, admirando las bellas plantas que le daban alegría al lugar. También proporcionaban oxigeno, lo que permitía que ellos respiraran. Y eran tan inconcientes de lo que ocurría, que talaban los árboles! El futuro se me presentaba nublado, mas con todas las cosas que estaban destruyendo, se quedarían sin nada. Los afectados no éramos nosotros...en realidad, sí…

Llevaba puesto un hermoso vestido blanco, el cual estaba en el guardarropas de mi recipiente. Ella era muy bonita y expresaba todo con simples movimientos de cuerpo. Me gustaba. Es mas, se había entregado con Fe y sin dar vuelta atrás, segura, decidida. Una de las pocas jóvenes puras en esta tierra.
Levanté la vista al cielo, suspirando. Wow, que extraño se había sentido eso! Acaso era una muestra de…echar de menos mi hogar? A mi señor? Como fuese, ahora también tenía una misión: encontrar a mi protegido. No seria tarea facil…

¡Al fin! el aura de un ángel... llevaba entre las sombras toodo ese tiempo esperando alguno... bueno ya me había encontrado con mi hermano Gabriel... pero ese contaba como caso especial, a ese no quería hacerlo sucumbir sino destruirlo... pero a la que vi desde las sombras no... a ella quería sucumbirla en la oscuridad que se renegara de los angeles y viniera al lado de los demonios... o en su caso destruirla que venía a ser lo mismo.

De pronto aparecí frente a ella... clavando mis ojos negros azabaches en ella manteniendo una distancia al menos hasta que supiera el alcance del poder de la chica aunque ya de cajón sabia que era menos poderosa que Gabriel no debía de confiarme... eran muy engañosas sobre todas esas con carita de buena como aquella:

Vaya... vaya...vaya...-dije esbozando una sonrisa malvada mientras la miraba-Así que es cierto... los ángeles han caido del cielo

Maldad era lo que se respiraba... mi aura ennegrecía todo el lugar provocando asi una especie de escudo que atenuaría la luz que ella pudiera crear... si podía atenuar y parar la de mi hermano Gabriel... la de ella me sería dificil pero igual de posible, aun así me mantuve tranquilo riendo con maldad al notar su miedo y su asombro al verme y me transporté a su espalda para ir apoar mis manos en sus hombros... pero tuve que quitarlas... su aura era muy potente... excelente.

Me teletransporte frente a ella con un gran humo oscuro de nuevo y hable con mi semblante serio y sin olvidar contyra que hablaba, sabiendo que los ángeles eran los únicos capaces de derrotar a los demonios pero olvidaban que yo en su tiempo... fui un ángel:

¿Envidia?... te recuerdo que yo fui el primer ángel en caer del cielo ¡PARA COMANDAR LOS FUEGOS DEL MISMISIMO INFIERNO!-bramé en consecuencia-Además... yo siempre me alzo no bajo, los ángeles cada vez estais más estúpidos